domingo, 17 de octubre de 2010

La hermosísima princesa rusa ha renacido en invierno. Florecita roja momoku te amo.

Gracias Amélie Nothomb

"Una hermosísima princesa rusa yacía desnuda sobre la nieve, en una montaña. Tenía el pelo largo y negro y ojos profundos, que se adaptaban perfectamente a su tipo de sufrimiento. Porque el frío le hacía padecer dolores abominables. Únicamente su cabeza sobresalía de la nieve y veía que no había nadie para salvarla. Larga descripción de sus sollozos y de sus tormentos. Me lo pasaba en grande. Entonces llegaba otra princesa, dea ex machina, que la sacaba de allí e intentaba hacen entrar en calor el cuerpo congelado. Yo me moría de voluptuosidad al contar cómo ella se las apañaba para hacer algo."

El sabotaje amoroso
Amélie Nothomb

domingo, 21 de junio de 2009

Sueño profundo


La obra de Banana Yoshimoto, autora japonesa contemporánea, muestra la exquisitez nipona para expresar situaciones que fluctúan entre lo onírico y la realidad. Sueño profundo narra tres historias de mujeres a quienes el amor conduce a transitar el mundo como una dimensión entre la vida y la muerte.
Leamos...
“Sin embargo…¿no estaré erosionando mi vida? Últimamente, esto es lo que me viene a la cabeza en el momento de despertar. Me da un poco de miedo. No se trata sólo de que, al final, he acabado por dormir sin oír sus llamadas, sin que mi sueño es tan profundo que, en el instante de abrir los ojos, me parece haber vuelto de la muerte a la vida, tan profundo que a veces pienso que, si me contemplara desde fuera a mí misma durmiendo, quizá no vería más que un blanquísimo esqueleto. También me fascina a veces la idea de no despertar jamás, de ir pudriéndome y desaparecer en la eternidad. Tal vez esté poseída por el sueño…”

viernes, 19 de junio de 2009

Felicidad que no existe

Pero flota en la ausencia de tu mirada. Barres la alcoba sin pestañear. Ahora sé que puedo serte fiel, nada que ocultar. Me has dicho no te vayas, sigue conmigo toda la línea del tren. Bellos durmientes aún no muertos.

viernes, 22 de mayo de 2009


Cosas que suscitan una profunda memoria del pasado


Es un día de lluvia y me aburro. Para pasar el tiempo, comienzo a mirar papeles viejos. Y entre ellos encuentro las cartas de un hombre al que una vez amé.

domingo, 10 de mayo de 2009


"Escribí para mi propio entendimiento, y apunté únicamente lo que sentía. Nunca esperé recibir, sobre estos escritos casuales, comentarios tan importantes como los que se dedican a notables libros de nuestro tiempo. Me sorprendo cuando escucho cómo los lectores aseguran que se sienten apabullados ante mi trabajo. Pero es natural que actúen así: conozco la mentalidad de aquellos que hablan bien de lo que detestan y critican lo que les gusta. Por eso todavía lamento que hayan leído mi libro".
Sei Shonagon

En honor a Sei Shōnagon (清少納言)


Cosas odiosas


Ordenar las actividades de tu día en espera de que el amado venga a visitarte, tal y como ha prometido, y comprobar que no aparecerá tocando el timbre de tu casa, y mucho menos llamará para pedir disculpas.


Preparar una sopa deliciosa de tofu para recibir al amado y al final del día comprobar que el plato servido se ha enfriado.